Tu hijo es mío: "?Oye, no tengo ayudante en el ambulatorio, bueno, diré el barracón... Si tú te prestas a hacerme de enfermera... ?¿Cuánto me pagará? ?Nada. Yo tampoco cobro. Marta se le quedó mirando con los ojos muy abiertos. ?¿Y por qué viene a este lugar si no le pagan? ?Pues porque quiero. ?Será rico y vendrá aquí a hacer la caridad... ?No soy rico, pero tengo vocación de médico y la rutina de un hospital no me agrada aunque no tengo más remedio que aceptarla para comer... Observarás que no sólo eres tú la desgraciada."